La Mina de Quintana es una mina subterránea construida durante la guerra civil, se construyó para comunicar diferentes edificios emblemáticos de la ciudad y como posible vía de evacuación.Con el transcurso de la guerra se decidió sellar y así ha permanecido desde entonces. Han sido muchos los grupos que han intentado descubrir los secretos que oculta esta mina, se habla de numerosas salas repletas de minerales muy preciados, de un valor incalculable.Tú, minero intrépido, has conseguido contactar con el nieto de un minero que participó en su construcción que tiene los planos, habéis quedado a la entrada de la mina y os ayudará en vuestra misión, con una condición, el trato será repartir lo que encontréis allí abajo.Accede a la Mina de Quintana de la Mina Madrid Escape Room.
Dificultad: Media
misterio
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La experiencia en La Mina de Unreal Room Escape Madrid ha sido, sin duda, espectacular. Desde el inicio, la sala te envuelve en una atmósfera inmersiva que no te suelta hasta el final. A pesar de haber jugado en la versión de Barcelona, la sala en Madrid mantiene su propio encanto con suficientes diferencias para hacerla rejugable en parte. El diseño y las pruebas están muy bien pensados, logrando que tanto jugadores experimentados como novatos disfruten de una experiencia fluida y emocionante.
La trama gira en torno a una mina subterránea abandonada, construida durante la guerra civil como una vía de evacuación. El contexto histórico está bien integrado, y aunque la historia no sea excesivamente compleja, se siente coherente y añade un buen telón de fondo para las pruebas. La narrativa te lleva a descubrir secretos ocultos y buscar riquezas minerales, lo que motiva el avance del juego de manera natural.
Las pruebas son variadas y dinámicas. Aunque algunas pruebas podrían recordar a las de la versión de Barcelona, se han añadido nuevas y originales que hacen que esta sala tenga su propia personalidad. La mezcla entre pruebas de lógica y destreza física mantiene al grupo siempre activo, sin abusar de los típicos candados. En ciertos momentos, algunas pruebas parecían estar un poco fuera de contexto en relación con la historia, pero en general están bien integradas.
El punto más fuerte de La Mina es su ambientación. Desde el momento en que entras, te sientes transportado a un entorno minero. La decoración es detallada y está muy bien cuidada, logrando un ambiente realista que mejora la inmersión. Hay partes donde los efectos visuales y sonoros te hacen sentir dentro de una auténtica mina, lo cual es impresionante. Aunque algunos opinan que la ambientación de la versión de Barcelona supera en ciertos puntos a la de Madrid, esta última sigue siendo de altísimo nivel.
La zona de recepción es adecuada, limpia y con todo lo necesario para que el grupo se sienta cómodo antes y después del juego. El Game Master fue clave para el éxito de la experiencia, ya que supo cuándo intervenir y guiar sin desvelar demasiado. Las pistas eran sutiles y precisas, aportando fluidez al juego sin romper la inmersión.
La dificultad es media, ideal para un grupo con experiencia o para aquellos que buscan un reto moderado. Las pruebas requieren trabajo en equipo y pensamiento crítico, pero sin llegar a ser frustrantes. Si bien algunos grupos más experimentados pueden encontrarla algo sencilla, el ritmo del juego hace que la experiencia sea agradable para cualquier nivel de jugador.
9.2/10
La Mina es una sala de escape imprescindible para los amantes de este tipo de experiencias en Madrid. Con una excelente ambientación, pruebas dinámicas y una historia bien hilada, proporciona una experiencia emocionante para cualquier jugador, tanto si has jugado la versión de Barcelona como si no.